Desde un empleado en relación de dependencia, pasando por un Jubilado o Pensionado, un simple negocio de barrio o una gran empresa, absolutamente todos tienen en común que para sus empresas, sus negocios o su economía, precisan de la ayuda profesional de un Contador Público.
Un profesional en Ciencias Económicas y más precisamente un Contador Público en la actualidad es necesario para cualquier situación personal, laboral, comercial, económica, financiera e impositiva.
Si bien los avances tecnológicos hacen más «prácticas» ciertas tareas que en tiempos anteriores eran manuales o llevaban un excesivo tiempo en su preparación, ello no ha generado una merma en la necesidad de contar con un contador que colabore activamente en la tarea o en la guía y asesoramiento de personas y empresas.
Pareciera que la practicidad en cambio, hace cada vez más imprescindible la actuación y acompañamiento de un Contador. No sólo porque el profesional se anticipa a ciertos inconvenientes que pueden devenir de un acción equivocada ante AFIP, ANSES, DGR, Municipalidad y cualquier otro organismo, sino que en numerosas oportunidades es contratado para solucionar el inconveniente que se generó por no haberlo contratado con anterioridad.
Un contador asesora en las materias que le competen y allí radica el agregado de valor que puede generar. El Contador está capacitado para guiar inscripciones, representaciones ante los organismos fiscales y previsionales, tramitar y liquidar impuestos, conoce sobre régimenes de información obligatorios, es determinante en materia laboral al liquidar sueldos y ser consultados por obligaciones y derechos de empleados y empleadores, entre las tareas habituales.
¿Eso es todo? Para nada. Los tiempos actuales, y la alta presión fiscal actual, generan que el Contador advierta y asesore sobre compra de moneda extranjera, sobre cómo generar el formulario para la retención del Impuesto a las Ganancias sobre sueldos, sobre la generación del CETA al momento de comprar y vender un bien móvil, generación y pago de los aportes para el personal de casas particulares, modifique estructuras de facturación (factura electrónica es la última novedad) le ayuda al comerciante a exhibir la documentación exigida legalmente, administra, presenta los libros laborales, impositivos y societarios, colabora en materia económica y financiera, liquida impuestos anuales y mensuales de todo tipo.
Los campos de acción se han multiplicado al mismo ritmo que los cambios tecnológicos fueron incorporándose en los trabajos cotidianos y habituales del Contador. Por ello y muchos aspectos más, mantener el asesoramiento de un contador es fundamental en los tiempos actuales.
Desde nuestra óptica, “Agregar valor a las empresas que confían en nosotros” no es sólo un deseo, sino que es el objetivo mismo del Estudio Contable.
No deje el destino de su empresa en manos equivocadas, agregue valor a sus negocios a través de LGB & ASOCIADOS.
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